En los últimos años, Tinariwen se ha convertido en un grupo de culto que entusiasma y consigue adeptos más allá de los círculos de aficionados a la world music. Pero esta formación de Mali no es precisamente una recién llegada al mundo de la música: sus orígenes se remontan a principios de la década de los ochenta, cuando el guitarrista Ibrahim Ag Alhabib se reunió con otros músicos que luchaban en la revolución tuareg, y con los que compartía el deseo de abrir la tradición de las músicas africanas a influencias occidentales y de alto voltaje eléctrico, como Bob Dylan o Jimi Hendrix.

Esa obsesión continúa en “Elwan”, en el que colaboran grandes artistas occidentales como Mark Lanegan, Kurt Vile o Matt Swenney. De hecho, Robert Plant o Flea son fans reconocidos. Damon Albarn los sitúa entre los mejores músicos del mundo y Thom Yorke asegura haber copiado sus riffs de guitarra.

“Elwan” se grabó durante una sesión en el Rancho de La Luna en Joshua Tree. Es un viaje a ninguna parte, a un pasado que ya no existe, que ha sido borrado por siglos de ocupación y de diáspora, en el que los personajes que protagonizan sus canciones buscan la verdad y evocan una tierra que ha desaparecido.